A la hora de comprar equipamiento para surfear, es muy normal que todos, al principio, busquemos la cantidad de productos mínimos necesarios para poder practicar el surf. Por este motivo, es muy común que los escarpines siempre queden como una parte del equipamiento opcional. La pregunta entonces es, ¿valen realmente la pena? La respuesta, en mi opinión, es muy clara: sí.
Los escarpines son una parte del equipamiento muy económica que apreciaremos en el día a dia en la práctica del surf.
1. Protección contra el frío:
Te olvidas, por fín, de meterte en el agua con el neopreno y sentir un frío tremendo en los pies. El frío en los pies lo sufrimos constantemente en aguas oceánicas y en tiempos de invierno. Sin embargo, con los escarpines puestos simplemente notarás un poco de humedad y ya está. No más golpes de frío y andar moviendo los pies con tal de que les llegue la circulación.
2. Protección al caminar por piedras, rocas y vegetación salvaje.
Con los escarpines podrás andar desde tu ubicación hasta el agua andando tranquilamente por el asfalto, por las piedras o por la vegetación sin sufrir pinchazos o rozaduras en las plantas de los pies. Los puedes usar a modo de chancletas sin tener que dejarlas tiradas en la arena y sin tener frío en los pies durante el desplazamiento de ida y de vuelta.
3. Agarre extra en la tabla
Con los escarpines tendremos mayor sensación de agarre y control en la tabla ya que su suela de goma se pega mucho mejor a la tabla que los pies desnudos sobre la parafina. En mi caso lo noto muchísimo cuando llega el buen tiempo y hago mis primeros take-offs sin escarpines.